Las indiscutibles ventajas de la movilidad eléctrica, de las que te hemos hablado aquí y aquí, convencen cada vez a más gente para comprarse un coche eléctrico. Pero cuando uno se decide a dar este paso, hasta el último momento le queda la duda de las dificultades de recarga, relacionadas con la disponibilidad de las estaciones de recarga y la velocidad de «repostaje». El miedo es legítimo, y solo desaparecerá tras los primeros meses de uso, cuando uno tenga pruebas concretas, en su vida cotidiana, de que Italia también está preparada. Además, como hemos tenido ocasión de informar, la situación mejora constantemente, día tras día, gracias al compromiso de los operadores que tienen en marcha planes de desarrollo concretos, como el anunciado por la ciudad de Parma en colaboración con Be Charge, que prevé la construcción a corto plazo de 50 estaciones con 100 puntos de recarga, de los cuales 9 Fast Charge de 100 kW. Parma es uno de los primeros municipios de Emilia en dotarse de una red de recarga tan extensa para vehículos eléctricos y forma parte de la reforma de la movilidad que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Parma. Para que todos los futuros compradores, pero también los actuales propietarios de un vehículo eléctrico, puedan orientarse y utilizar correctamente la red de estaciones de recarga, en este artículo describimos todos los tipos de conectores utilizados hasta la fecha (en estaciones de recarga y coches) y lo que permiten hacer. La presencia de múltiples conectores está vinculada no solo a las diferentes normas, sino también a su capacidad para manejar diferentes cargas de corriente que permiten recargar de forma más rápida o más lenta. La buena noticia es que prácticamente todos los vehículos eléctricos en circulación y las estaciones de carga utilizan un conector de tipo 2, también llamado Mennekes. Este conector admite un amperaje máximo de 32 A en una red monofásica de 230 V (como la que tenemos en nuestras casas), o de hasta 70 A en una red trifásica de 400 V (habitual en la industria o para suministros residenciales de más de 10 kW). Como ya se ha mencionado, este conector se puede encontrar en muchas estaciones de recarga, que suelen ofrecer velocidades de carga de hasta 22 kW. En algunos casos es posible llegar hasta los 43 kW, pero esta solución requiere estaciones de recarga con cable integrado, mientras que la gran mayoría de los puntos de recarga requieren la conexión del cable suministrado con el coche. Este conector se ha desarrollado todavía más para dar vida a lo que se denomina CCS COMBO 2. Básicamente, se trata de un Tipo 2 al que se le ha añadido un conector adicional por debajo (las conexiones eléctricas en este caso son diferentes, pero esto no es algo que deba importarte a efectos de uso). La toma adicional suministra corriente continua que permite una recarga rápida. Con este conector se alcanzan picos de 200 kW, pero las estaciones de recarga no suelen superar los 50/100 kW. Es importante recordar que la velocidad máxima de carga de un coche viene definida por el propio coche, por lo que puede variar en función del coche que poseas, pero es bastante seguro decir que si necesitas tiempos de carga reducidos, debes buscar una estación de carga equipada con este conector. En aras de la exhaustividad, mencionamos los demás tipos de conectores. El tipo 1 (Yazaki) permite cargar a una velocidad máxima de 7,4 kW, y es popular en Japón y Estados Unidos. El «Tipo 3A», también llamado «Scame», carga a una velocidad máxima de 3,7 kW, y hoy en día se utiliza casi exclusivamente para vehículos ligeros, como los escúteres. Para la carga en corriente continua, los principales conectores incluyen CHAdeMO, otra norma de carga rápida que permite cargar los coches hasta 50 kW, aunque se puede acceder a potencias superiores. El «tipo 3C» es un conector idéntico al «tipo 2» en cuanto a la potencia que puede suministrar, pero tiene una forma diferente. Está extendido en Francia. A pesar de la presencia de diferentes conectores, como hemos visto, la situación en Italia (y en la mayor parte de Europa) está muy simplificada, ya que tanto los coches como las estaciones de recarga ofrecen una compatibilidad ampliada con el conector de tipo 2, que se convierte en Mennekes en las estaciones de recarga rápida. Así que si te preguntabas sobre la dificultad de encontrar siempre una estación de recarga que tenga conectores compatibles para tu coche, el problema no será tal ya que allá donde vayas siempre encontrarás una estación de recarga de Tipo 2 compatible. En colaboración con: